México colocó 4,500 millones de dólares en bonos globales , en su tercera emisión de deuda del año, buscando adelantarse a la volatilidad derivada del conflicto entre Israel e Irán, según informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Los bonos, con vencimientos en julio de 2032 y enero de 2038, fueron suscritos por bancos como Barclays, BBVA, Goldman Sachs, Mizuho y Morgan Stanley.
La operación responde a temores por una posible escalada en Medio Oriente, tras ataques iraníes a bases estadounidenses y bombardeos israelíes a instalaciones nucleares. “La emisión fortalece la posición financiera del país ante un entorno global incierto”, señaló el subsecretario Gabriel Yorio en X. La estrategia incluye refinanciar pasivos para aliviar presiones en 2025.
La emisión atrajo fuerte demanda, reflejando la confianza en los fundamentos económicos de México, pese a la caída del peso y el alza del petróleo. Otros emisores, como Kuwait y la brasileña JBS SA, también aprovecharon los mercados antes de una posible intensificación del conflicto. Analistas de PineBridge Investments destacaron la resiliencia de los mercados emergentes frente a la incertidumbre geopolítica.
