El director general del segundo banco más grande de Rusia, VTB, Andrey Kostin, advirtió que las sanciones impuestas a Rusia han puesto en peligro la confianza en el dólar y el sistema financiero occidental. Durante su participación en el Foro Económico Oriental, Kostin subrayó que Rusia está impulsando la desdolarización del comercio por necesidad, no como un intento de socavar el dólar.
Kostin destacó que el dólar se ha utilizado de manera ilegal como arma política, lo cual considera inapropiado, ya que debería ser una moneda libre de riesgos políticos y geopolíticos. Citando una famosa frase de la película ‘El Padrino III’, señaló que «las finanzas son un arma, la política es saber cuándo apretar el gatillo». Explicó que esta es precisamente la táctica que los políticos occidentales han empleado al utilizar el dólar como una herramienta contra Rusia y otros países.
El director de VTB afirmó que, hace una década, la mayoría de los países preferían utilizar el dólar en transacciones internacionales, pero las amenazas de Estados Unidos de cortar el acceso al dólar a otras naciones han llevado a una reevaluación de esta posición. Ahora, más países están considerando utilizar monedas locales en sus transacciones internacionales.
Kostin sostuvo que es el momento adecuado para que los países del Sur Global comiencen a construir su propio sistema financiero basado en monedas nacionales, independiente del sistema financiero occidental. Argumentó que el mundo está experimentando cambios significativos en el equilibrio de poder económico, lo que permite la creación de un sistema financiero diferente basado en principios de independencia y soberanía, así como en el uso de monedas distintas al dólar y el euro.
La propuesta de Kostin para un nuevo sistema financiero incluye la sustitución de SWIFT por un nuevo sistema de mensajería, la creación de relaciones de corresponsalía entre bancos locales basadas en tecnología blockchain, la instauración de un centro internacional de liquidación de depósitos en el Golfo Pérsico y la creación de nuevos instrumentos para recaudar capital en lugar de utilizar bonos en moneda extranjera vinculados a Occidente.
