Como parte de los esfuerzos para fortalecer a Petróleos Mexicanos (Pemex), la empresa y el gobierno federal han comenzado a planificar un recorte del 5% en el costo laboral, lo que podría traducirse en despidos, principalmente de empleados catalogados como de “confianza”.
En una presentación titulada “Definición de la estructura básica de Pemex”, se detalló que se llevará a cabo una revisión del modelo laboral para definir una estructura organizacional con solo cuatro niveles jerárquicos. Este recorte del 5% considerará plazas definitivas, vacantes, temporales, jubilaciones completas, jubilaciones actuales de empleados con más de 27 años de servicio y liquidaciones.
«La estructura básica propuesta no podrá superar el techo presupuestal asignado a la dirección, por lo que cualquier cambio deberá mantenerse dentro de un costo compensado. Cada puesto en la nueva estructura debe justificarse por su impacto en las operaciones y su contribución a los objetivos estratégicos», se señala en el documento.
El objetivo de estas medidas no solo es reducir costos, sino también eliminar trabajos redundantes, unificar funciones y garantizar que todos los proyectos críticos de Pemex estén cubiertos, mientras que las funciones de soporte administrativo serán centralizadas.
Hasta el tercer trimestre de 2024, Pemex reporta 129,816 plazas laborales, ligeramente por encima de las 128,616 registradas en 2023. Aunque la empresa no especifica cuántos de estos puestos son de confianza, se sabe que la mayoría están afiliados al sindicato, y la reducción afectará exclusivamente a los empleados de confianza.
“Como parte de esta política, la creación de plazas definitivas y temporales del régimen de confianza dependerá de la aprobación de la nueva estructura”, se detalla en el informe.
Esta estrategia contrasta con el plan de basificación impulsado en el sexenio anterior, que tenía como objetivo otorgar plazas definitivas a al menos 17,000 trabajadores, basándose en antigüedad, aptitud y función operativa estratégica.
«Cada puesto debe justificarse por su impacto en las operaciones y su contribución a los objetivos estratégicos de Pemex», señala el documento.
En línea con la política de austeridad, Pemex entregó a la Subdirección de Capital Humano la información sobre las plazas laborales para realizar un cálculo que permita reducir el 5% del costo total, lo que también llevará a la cancelación de ciertos puestos.
Estas acciones forman parte de la estrategia para generar ahorros por más de 50,000 millones de pesos, con el fin de fortalecer la capitalización de la empresa y optimizar el uso de los recursos. Esto ocurre en un contexto de crisis para Pemex, que enfrenta impagos a proveedores y una deuda financiera que sigue siendo la más alta a nivel mundial en el sector petrolero.