Las fábricas en Italia han experimentado una desaceleración durante seis meses consecutivos, mientras la manufactura continúa disminuyendo en una señal de una profunda recesión industrial, informó Bloomberg el lunes, citando una encuesta de S&P Global.
Un índice basado en las respuestas de los gestores de compras (PMI) se situó en 46,8 en septiembre, frente a 45,4 en agosto, muy por debajo de la marca de 50, lo que indica una contracción.
La industria y la manufactura italianas, en particular, han estado pasando apuros en los últimos meses debido a la falta de nuevos pedidos a medida que la demanda global se debilitaba.
«La economía industrial italiana parece estar atrapada en una profunda recesión sin una salida clara».
(Economista del Banco Comercial de Hamburgo, Tariq Kamal Chaudhry)
«Los nuevos pedidos, tanto nacionales como internacionales, se están reduciendo, e incluso las expectativas de producción futura han caído muy por debajo de su promedio a largo plazo».
Aunque la encuesta PMI indicó cierto aumento en el empleo en las fábricas, apuntó principalmente a una escasez de trabajadores calificados, mientras que el informe anterior de S&P dijo que las fábricas italianas habían comenzado a despedir personal debido a una contracción más profunda en la producción industrial.
Los economistas pronostican que continuará la recesión manufacturera, que comenzó en la tercera economía más grande de la eurozona a mediados del año pasado.
El sector manufacturero representa alrededor del 16% de la producción de Italia, pero su debilidad continúa pesando sobre la economía italiana, arrastrándola a una mayor contracción.
Las últimas estimaciones muestran que la economía del país se contrajo un 0,4% (frente al 0,3% previsto) en el segundo trimestre del año.
