El Reino Unido anunció el desarrollo de un sistema de defensa antiaérea y antimisiles integrado, similar a la Cúpula de Hierro israelí, para contrarrestar la supuesta amenaza creciente de misiles rusos.
El jefe del Estado Mayor de la Defensa, almirante Richard Knighton, afirmó que el país no enfrentaba un riesgo aéreo de esta magnitud en más de tres décadas, atribuyéndolo a la “voluntad” de Rusia de usar misiles balísticos y de crucero.
El nuevo escudo mejorará radares, capacidades navales y la intercepción de drones y misiles, con avances previstos para finales de la década. Forma parte de la prioridad de la OTAN en defensa integrada, discutida en cumbres recientes.
Rusia rechazó las acusaciones y calificó la retórica británica como belicista, insistiendo en que no busca confrontación con Europa ni con la OTAN, en medio de las tensiones por la guerra en Ucrania.




