Los patrones de consumo de sustancias en México han mostrado cambios significativos en los últimos años. Aunque el alcohol continúa siendo la sustancia más consumida en el país, su ingesta ha disminuido entre adolescentes, mientras que el uso de marihuana y vapeadores registra un aumento relevante entre distintos grupos de la población.
De acuerdo con los resultados más recientes de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT 2025), el consumo general de alcohol en la población de entre 12 y 65 años pasó de 71% en 2015 a 73.7% en 2025. Este incremento se explica principalmente por el aumento en mujeres adultas, cuyo consumo subió de 62.6% a 69.3% en el mismo periodo.
En contraste, el consumo de alcohol entre adolescentes mostró una reducción notable. La proporción de jóvenes que reportó haber ingerido alcohol disminuyó de 28% a 17.8%, mientras que el consumo mensual excesivo bajó de 8.3% a 2.6%, lo que sugiere un cambio en los hábitos de este sector de la población.
La encuesta también revela transformaciones importantes en el consumo de otras sustancias. El cannabis se mantiene como la droga ilegal con mayor prevalencia y su uso continúa al alza, al pasar de 9.3% a 13.3% de la población. Este incremento ha encendido alertas en el sector salud por sus posibles impactos en el bienestar, particularmente entre jóvenes.
Otro fenómeno relevante es el aumento en el uso de vapeadores, a pesar de que el tabaquismo tradicional ha mostrado señales de disminución en algunos segmentos. Las autoridades sanitarias han advertido que estos dispositivos representan un riesgo para la salud y han planteado reforzar las campañas de prevención y concientización, con especial énfasis en la población juvenil.
Ante este panorama, el gobierno federal ha señalado que para 2026 se impulsarán estrategias integrales de prevención, atención y tratamiento, enfocadas en reducir el consumo de vapeadores y otras sustancias, así como en fortalecer la información y orientación dirigida a niñas, niños y adolescentes.
Respecto al aumento en el consumo de marihuana, se reiteró que, más allá de los debates legales y las distintas posturas internacionales, la prioridad es desalentar el uso de drogas y promover una cultura de prevención desde edades tempranas, privilegiando la salud pública y el bienestar de la población.




