“En Puebla nos enfrentamos al cártel de las concesiones que gobiernos de derecha dejaron como bomba de tiempo”, denunció el coordinador de Gabinete, José Luis García Parra, al revelar que desde 2013 se disfrazaron deudas millonarias como “modelos de inversión” para saquear legalmente al estado.
En la mañanera, el funcionario expuso que la actual administración de Alejandro Armenta heredó contratos leoninos que siguen sangrando las finanzas públicas y que, por sí solos, comprometen el futuro de varias generaciones de poblanos.
El caso más escandaloso es el de RUTA: aún quedan 29 años de concesión privada y romperla costaría más de 22 mil millones de pesos, dinero suficiente para renovar todo el transporte público del estado.
Peor aún, el agua potable sigue en manos privadas y recuperar su control costaría otros 7 mil millones, mientras el Congreso fue despojado de su facultad para fijar tarifas.
“Ya se han pagado más de 4 mil millones por este esquema de saqueo y vamos a pararlo”, sentenció García Parra, al reiterar que el gobierno de la Cuarta Transformación en Puebla no permitirá que sigan robando a plena luz del día el patrimonio de las y los poblanos.
