El gobierno chino emitió una directiva que prohíbe a las empresas tecnológicas del país utilizar los chips H20 de Nvidia, diseñados específicamente para cumplir con las restricciones de exportación impuestas por Estados Unidos. La medida busca impulsar el desarrollo y adopción de procesadores de inteligencia artificial (IA) fabricados por empresas locales, como Huawei y SMIC, en un contexto de creciente rivalidad tecnológica con Occidente.
, la decisión responde a la estrategia de Pekín para reducir su dependencia de tecnologías extranjeras, especialmente tras las sanciones estadounidenses que limitan el acceso a chips avanzados. Los chips H20, una versión menos potente de los modelos de Nvidia, fueron creados para sortear estas restricciones, pero China considera que su uso podría frenar el avance de su industria tecnológica doméstica. En cambio, el gobierno promueve alternativas como los chips Ascend de Huawei, que, aunque menos competitivos, son clave para la autosuficiencia tecnológica.
Esta prohibición llega en un momento de tensiones comerciales globales, exacerbadas por las recientes amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer aranceles del 25% a productos chinos. Expertos advierten que la medida de Pekín podría intensificar la guerra tecnológica, afectando a empresas como Nvidia, cuya valoración ha crecido un 262% en 12 meses gracias al auge de la IA. En China, el mercado de IA generó ingresos por 23 mil millones de dólares en 2024, y se espera que alcance los 38 mil millones para 2027.
