La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) descartó el cierre de plantas de Nissan o Ford en México, desmintiendo rumores sobre una posible fuga de armadoras debido a las políticas comerciales de la administración de Donald Trump. Odracir Barquera, presidente de la AMIA, aclaró que ambas empresas mantienen sus operaciones en el país, que representa el 7% de la producción automotriz global, con exportaciones por 92 mil millones de dólares en 2024.
Las amenazas de Trump de imponer aranceles del 25% a vehículos fabricados en México fuera del T-MEC han generado incertidumbre, pero la AMIA subrayó que el tratado protege el 85% de las exportaciones mexicanas. Nissan, con plantas en Aguascalientes y Morelos, y Ford, con instalaciones en Chihuahua y Hermosillo, han reafirmado su compromiso con México, apostando por la integración de la cadena de suministro regional.
Analistas de Banorte prevén que los aranceles podrían encarecer los costos en un 3-5%, pero el impacto sería limitado por la fortaleza del T-MEC. La industria automotriz mexicana, que emplea a 900 mil personas, busca negociar exenciones arancelarias antes de la revisión del tratado en 2026, clave para la competitividad.