La reforma impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum para reducir la jornada laboral a 40 horas semanales será analizada a profundidad en foros y reuniones con organizaciones sindicales y empresariales, informó el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado, Oscar Cantón Zetina.
El legislador explicó que tanto la reforma al artículo 123 constitucional como los cambios a la Ley Federal del Trabajo serán abordados en el próximo periodo ordinario, que inicia en febrero de 2026. Señaló que no existe una fecha límite para su aprobación, pero subrayó que la intención es procesarla con tiempo suficiente para que pueda entrar en vigor en 2027.
Indicó que la reducción de la jornada, de 48 a 40 horas semanales, será implementada de manera gradual, y que durante 2025 únicamente se recibirán propuestas y observaciones para construir un dictamen sólido. En el proceso participarán especialistas, asesores laborales, académicos y organizaciones sociales.
Aún no se define si habrá un parlamento abierto, ya que las comisiones deberán determinar el mecanismo legislativo más adecuado. El senador sostuvo que existe avance previo gracias a diversas reuniones que han permitido acercar posiciones entre los distintos sectores, con la intervención del secretario del Trabajo.
Rechazó que se trate de una simulación, como acusa la oposición, al asegurar que el objetivo es instaurar formalmente la semana laboral de 40 horas conforme a los acuerdos alcanzados entre los sectores sindical y empresarial.
Cantón Zetina recordó que primero debe aprobarse la reforma constitucional y posteriormente la legislación secundaria. Afirmó que, aunque aún falta un tramo legislativo importante, ya existe una definición clara y un compromiso del gobierno federal para cumplir esta promesa anunciada desde la campaña presidencial.




