En un acto simbólico de combate frontal al narcotráfico, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, acompañado del fiscal estatal de la FGR, Víctor Luis Soto Leyva, encabezó la incineración de más de dos toneladas de estupefacientes y la destrucción de objetos del delito, reafirmando el compromiso estatal por blindar a la juventud y la sociedad sinaloense contra las drogas.
Junto a integrantes de la Mesa de Seguridad, Rocha Moya elogió la coordinación inédita entre corporaciones federales, estatales y militares: “Como nunca, la sociedad aplaude su trabajo. Hay conciencia de que nos cuidan, y yo agradezco infinitamente”, enfatizó, al destacar que los operativos han devuelto tranquilidad a las calles y permitido concentraciones ciudadanas sin temor.
En total, se incineraron 940.8 kg y 165 litros de metanfetamina (cristal), 927 kg de marihuana, 3.2 kg de cocaína y 79.3 kg más 40 litros de diversos narcóticos, además de destruirse 327 máquinas tragamonedas aseguradas en Culiacán, Guamúchil y Mazatlán, chalecos y cascos balísticos, y una tonelada de medicamento caduco decomisado por COEPRISS.
Soto Leyva detalló que estas acciones preventivas evitan la recirculación de sustancias y objetos ilícitos, consolidando una Sinaloa donde la seguridad pública se traduce en bienestar palpable para sus habitantes.
