La propuesta del paquete económico 2025 presentada por la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, que contempla un aumento del 3% al 4% en el Impuesto Sobre Nómina (ISN), generó un intenso debate en el Congreso capitalino.
Críticas de la oposición
El coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), Andrés Atayde Rubiolo, rechazó la medida argumentando que:
- Representa un «impuesto al empleo» y desincentiva la formalidad.
- La creación de fideicomisos para gestionar los recursos provenientes del ISN contradice el discurso de la transparencia promovido por el Gobierno de la 4T, que eliminó fideicomisos a nivel federal.
Atayde propuso que los recursos se administren directamente por la Secretaría de Administración y Finanzas para garantizar mayor claridad en su manejo.
Defensa por Morena y aliados
Por su parte, la diputada de Morena, Elizabeth Mateos González, desestimó las críticas de la oposición, calificándolas de manipulaciones y asegurando que:
- El aumento no impactará a los trabajadores, pues no es un «impuesto al empleo».
El diputado del PRD, Pablo Trejo Pérez, explicó que la reforma considera tasas diferenciadas para proteger a las pequeñas y medianas empresas:
- Empresas con 1-10 empleados: Mantendrán la tasa actual del 3%.
- Empresas con 11-50 empleados: Tasa incrementará a 3.5%.
- Empresas con más de 50 empleados: Tasa será del 4%.
Además, señaló que el 93% de las empresas recibirán estímulos fiscales ligados a la generación de empleos, lo que busca mitigar el impacto de la medida en el sector productivo.
Implicaciones económicas
Este incremento busca fortalecer las finanzas públicas de la Ciudad de México, pero el debate refleja preocupaciones sobre sus posibles efectos en:
- La formalidad laboral, dado que podría incentivar esquemas informales.
- La competitividad de las empresas, especialmente las medianas y grandes.
Mientras tanto, la implementación de incentivos fiscales pretende equilibrar las cargas tributarias y fomentar la creación de empleo formal.
La discusión continuará en el contexto de la aprobación final del Código Fiscal 2025, con ambas posturas defendiendo visiones opuestas sobre la política tributaria y su impacto en la economía local.