En el marco del 57 aniversario de los Juegos Olímpicos de México 1968, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, reconoció a atletas olímpicos en el ex Convento de San Hipólito y los convocó a ser embajadores deportivos por la paz en la Ciudad de México.
La iniciativa busca que estos deportistas visiten comunidades afectadas por la marginación y la delincuencia, compartiendo sus experiencias en disciplinas como boxeo, taekwondo y atletismo para inspirar a las nuevas generaciones.
“El deporte es una herramienta poderosa para transformar la sociedad y fomentar talentos que nos llenen de orgullo”, afirmó Brugada.La mandataria destacó el legado de los atletas mexicanos, como Enriqueta Basilio, quien en 1968 marcó un hito al encender el pebetero olímpico, un momento que simbolizó la igualdad de género y fue visto por millones en el mundo.
Brugada anunció que su gobierno impulsa la construcción de infraestructura deportiva, incluyendo albercas, pistas de atletismo, gimnasios y canchas, para garantizar espacios de calidad que promuevan la actividad física. “Ustedes son un orgullo nacional y un ejemplo para nuestra juventud; su presencia en las comunidades ayudará a construir un futuro de paz y oportunidades”, subrayó.