Pionyang – Corea del Norte reafirmó su posesión de armas nucleares como la «opción más correcta» para contrarrestar amenazas externas, en respuesta directa al comunicado del G7 que condenó sus programas nucleares y de misiles, exigiendo desnuclearización total.
La vicecanciller Choe Son-hui criticó el «doble rasero» del grupo y enfatizó que, en el actual entorno geopolítico adverso, el arsenal nuclear es esencial para disuadir a «Estados hostiles», sin cambios en la postura soberana de la RPDC.
Kim Jong-un respaldó la declaración, asegurando que las armas nucleares serán «una realidad invariable» independientemente de las demandas de EE.UU. y aliados, incluso por décadas. Pionyang acusa al G7 de representar una «amenaza nuclear» a la paz mundial.
Este intercambio verbal intensifica las tensiones en la península coreana y Asia-Pacífico, donde persisten sanciones y ejercicios militares.




