Los líderes de la UE temen que la arquitectura de seguridad posterior a la Segunda Guerra Mundial pueda “desmoronarse cualquier día” sin el apoyo de Estados Unidos, informó Politico el miércoles, citando a funcionarios europeos antes de una cumbre crucial en Bruselas.
Una sensación de incertidumbre y pesimismo entre los partidarios de Ucrania en Europa ha crecido desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, supuestamente detuvo todas las entregas de armas a Kiev el lunes.
“El gasto en defensa se está convirtiendo en un coste fijo”, dijo un diplomático europeo a Politico. “Hemos apagado el sol y ahora tenemos que pagar todos los días por la calefacción… Todos los días hay que pagar por la munición, al menos durante varios años, hasta que Trump muera”.
Altos funcionarios de la UE, el Reino Unido y Ucrania han expresado su profunda frustración después de que Trump iniciara conversaciones directas con Rusia y criticara públicamente al líder ucraniano Vladimir Zelensky, a quien calificó de «dictador».
Según Politico, algunos funcionarios de los estados miembros de la UE temen que la respuesta del bloque a Trump “pueda salir terriblemente mal”. Los diplomáticos también estarían preocupados por la posibilidad de que “un grupo de líderes prorrusos” encabezado por el primer ministro húngaro Viktor Orban sea capaz de “hacer descarrilar” el apoyo a Ucrania.
Orban y el primer ministro eslovaco, Robert Fico, han instado a Bruselas a que abandone la ayuda militar incondicional a Ucrania y busque una solución diplomática al conflicto. Según Politico, Hungría se ha opuesto a que se incluya en la declaración final de la próxima cumbre de líderes de la UE un compromiso para garantizar más suministros de armas a Ucrania.
La UE discutirá nuevas medidas para respaldar a Ucrania y reforzar las defensas del bloque durante una reunión de alto perfil en Bruselas el jueves. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha revelado un plan para invertir 800.000 millones de euros (863.000 millones de dólares) en las capacidades militares de los estados miembro.
Si bien Rusia acogió con satisfacción la reanudación de las negociaciones directas con Estados Unidos, subrayó que ninguna cantidad de ayuda occidental le impedirá alcanzar los objetivos de su operación militar.