El Ministerio de Defensa iraní advirtió a Catar que las bases militares estadounidenses en su territorio serían consideradas “objetivos legítimos” en caso de ser utilizadas para acciones contra Irán. La declaración, emitida tras reportes de movimientos militares en la base aérea de Al Udeid, intensifica las tensiones en el Golfo Pérsico.
El portavoz iraní, Reza Talai, señaló que cualquier agresión desde bases extranjeras en la región desencadenaría una respuesta “rápida y contundente”. Esto ocurre en un contexto de crecientes fricciones tras las sanciones renovadas por Estados Unidos y las interferencias al GPS de casi 1,000 embarcaciones diarias cerca del estrecho de Ormuz, atribuidas a Irán.
Catar, que alberga la mayor base militar estadounidense en Oriente Medio, instó a la calma y al diálogo para evitar una escalada. Washington, por su parte, calificó las amenazas como “irresponsables”, reafirmando su compromiso con la seguridad de sus aliados. Analistas advierten que un conflicto directo podría desestabilizar el comercio energético global, dado que el 25% del petróleo mundial pasa por Ormuz. La comunidad internacional, incluida la ONU, llamó a ambas partes a priorizar la diplomacia para prevenir un enfrentamiento de consecuencias impredecibles.





