Estados Unidos ha autorizado el desarrollo y despliegue de misiles de alcance intermedio en el Indo-Pacífico, eliminando una restricción clave impuesta por el Tratado INF de 1987, según reveló este martes The Wall Street Journal. La medida responde directamente a la creciente capacidad militar de China en la región.
La decisión, impulsada por el Pentágono, permite a Washington desplegar armas con alcances de entre 500 y 5.500 kilómetros, prohibidas durante décadas para evitar una carrera armamentista con la Unión Soviética. Fuentes oficiales indicaron que los misiles se posicionarán en Guam y Japón, fortaleciendo la disuasión frente a los avances chinos en misiles balísticos y crucero.
Expertos militares consultados por el WSJ advierten que Pekín ha acumulado miles de misiles apuntados a bases estadounidenses en Asia, alterando el equilibrio estratégico. «Es hora de nivelar el campo de juego», afirmó un alto funcionario del Departamento de Defensa, subrayando que China no firmó el Tratado INF y ha ignorado sus límites.
Esta escalada genera tensiones con aliados europeos y Rusia, que critican el fin del tratado en 2019 bajo Trump. Analistas prevén una respuesta china, intensificando la rivalidad en el Pacífico.