La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó por unanimidad una demanda de 10,000 millones de dólares interpuesta por México contra fabricantes de armas estadounidenses, acusados de contribuir a la violencia de los cárteles de la droga. El fallo, emitido este jueves, determinó que la Ley de Protección del Comercio Legal de Armas (PLCAA) otorga inmunidad a empresas como Smith & Wesson, Colt, Glock y Beretta frente a reclamaciones por el uso indebido de sus productos.
México argumentó que estas compañías sabían que sus armas eran traficadas ilegalmente al país, alimentando la inseguridad. Sin embargo, la jueza Elena Kagan, en nombre del tribunal, señaló que la demanda no demostró de forma plausible que los fabricantes “ayudaran e instigaran” el tráfico ilícito. La decisión revoca un fallo previo de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito, que había permitido avanzar el caso iniciado en 2021 en Boston.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) expresó su “firme desacuerdo” y prometió agotar recursos legales y diplomáticos para frenar el flujo de armas. El embajador de EE.UU. en México, Ronald Johnson, reafirmó en X la colaboración bilateral para combatir el tráfico y la violencia. Una segunda demanda contra distribuidoras en Arizona sigue en curso.