Alemania anunció 40 millones de euros en nueva ayuda financiera para Ucrania, destinada a reparar calefacción, viviendas y suministrar generadores y productos básicos ante el invierno.
El ministro Johann Wadephul destacó que el objetivo es “mantener la luz y la calefacción encendidas” para la población civil afectada por los ataques rusos a la infraestructura energética.
El anuncio ocurre en medio de un escándalo de corrupción en Ucrania: la NABU detuvo a cinco personas por blanqueo de 100 millones de dólares en el sector energético, implicando a aliados cercanos a Zelenski, como Timur Míndich, quien huyó del país.
Pese a las críticas sobre la gestión de fondos internacionales, Alemania reafirma su apoyo a Kiev, sumando esta ayuda a los miles de millones de euros entregados desde 2022 en asistencia militar y humanitaria.
