El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defendió su propuesta de imponer aranceles a México como medida para combatir el tráfico de fentanilo, en un discurso pronunciado ayer desde la Casa Blanca. Trump acusó al gobierno mexicano de no hacer lo suficiente para frenar el flujo de drogas hacia su país, señalando que los aranceles serán una “herramienta clave” para presionar a México y financiar políticas antidrogas.
La propuesta, que incluye gravámenes de hasta 25% a importaciones mexicanas, ha generado tensiones con México. La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó las acusaciones, afirmando que México ha intensificado operativos contra el narcotráfico y que los aranceles afectarían a ambos países, dado el comercio bilateral de más de 800 mil millones de dólares anuales. “No se resuelve con muros ni impuestos, sino con cooperación”, afirmó.
Expertos advierten que los aranceles podrían encarecer productos clave, como automóviles y alimentos, afectando a consumidores estadounidenses y mexicanos. La Cámara de Comercio de EU expresó su preocupación por posibles represalias comerciales. Mientras tanto, el embajador Ronald Johnson respaldó a Trump, pero llamó al diálogo bilateral. La Casa Blanca aún no detalla la implementación de los aranceles, generando incertidumbre en los mercados.