El sector servicios de Estados Unidos mostró un crecimiento apenas perceptible en junio, mientras el empleo registró una contracción, según el índice de gerentes de compras (PMI) del Instituto de Gestión de Suministros (ISM), que se situó en 50.2, ligeramente por encima del umbral de 50 que indica expansión. Este dato refleja una desaceleración frente al 53.8 de mayo, evidenciando una economía en enfriamiento.
El subíndice de empleo cayó a 46.1, señalando una reducción en las contrataciones por primera vez en seis meses, lo que genera preocupación ante un mercado laboral que había sido resiliente. Las empresas reportaron menor actividad en sectores como hotelería y comercio minorista, impactados por la inflación y el aumento de tasas de interés. En contraste, el subíndice de precios pagados subió a 56.3, indicando presiones inflacionarias persistentes.
Analistas advierten que la combinación de un crecimiento débil y contracción laboral podría presionar a la Reserva Federal para ajustar su política monetaria. Sin embargo, algunos expertos ven en estos datos una señal de estabilización tras un período de alta volatilidad. El panorama económico de EU sigue incierto, con el sector servicios representando el 70% del PIB nacional.
