Los precios mundiales de la carne bovina alcanzaron un máximo histórico, según la FAO, por menor oferta en EE.UU. y Brasil, y alta demanda asiática. México enfrenta alzas del 15% en precios, presionando la inflación (3.8%).EE.UU., principal proveedor, redujo exportaciones por sequías, y Brasil favorece Asia.
México, que importa 30% de su carne, ve afectado el consumo, clave para el 60% del PIB, y al sector restaurantero.El sector ganadero mexicano, valuado en 25 mil millones de dólares, enfrenta costos altos y aranceles del TMEC.
La Secretaría de Agricultura propone subsidios, pero el presupuesto 2026 es limitado.El alza amenaza la seguridad alimentaria y el crecimiento. México debe diversificar proveedores y fortalecer la producción local para mitigar riesgos globales.