El oro podría llegar a los 5 mil dólares por onza antes de finales de 2026, según una proyección de Saxo Bank que anticipa un cambio estructural profundo en el mercado global de metales preciosos. Este rally responde a una reconfiguración del sistema financiero internacional, donde el oro pasa de ser un activo sensible a tasas de interés y dólar a uno estratégico impulsado por demanda sostenida.Ole Hansen, jefe de estrategia de materias primas en Saxo Bank, explicó que el metal ha experimentado un «cambio de régimen».
Factores como las compras masivas de bancos centrales superando las mil toneladas anuales desde 2022, la fragmentación geopolítica y riesgos fiscales han diluido la influencia tradicional de rendimientos reales y divisas. La invasión rusa a Ucrania en 2022 marcó un punto de inflexión, al congelarse reservas y elevar el oro como refugio contra sanciones.La demanda asiática y oficial ha absorbido ventas occidentales, estableciendo un piso sólido de precios.
Además, la dominancia fiscal en Estados Unidos, con crecientes pagos de intereses, y tensiones como la rivalidad con China erosionan la confianza en sistemas fiduciarios.En 2025, el oro acumula un alza del 64.3%, superando los 110% en dos años. Saxo Bank ve esta trayectoria como señal de una transición hacia un orden económico que prioriza resiliencia y diversificación.




