México mantuvo su posición como el principal socio comercial de Estados Unidos en la primera mitad de 2025, exportando bienes por 305,000 millones de dólares, un aumento del 7.2% respecto al mismo periodo de 2024, según datos de la Oficina del Censo de EE.UU. A pesar de los aranceles impuestos por la administración de Donald Trump, el comercio bilateral alcanzó un récord de 509,000 millones de dólares, consolidando a México como proveedor clave con una participación del 15.3% en las importaciones estadounidenses, superando a China (13.8%) y Canadá (12.9%).
El crecimiento se atribuye a la solidez del T-MEC y al nearshoring, que han impulsado las exportaciones manufactureras, especialmente en el sector automotriz y electrónico. México importó desde EE.UU. mercancías por 204,000 millones de dólares, un 4.1% más que en 2024, generando un déficit comercial para EE.UU. de 101,000 millones de dólares. Sin embargo, la amenaza de aranceles del 30% a partir de agosto, anunciada por Trump, genera incertidumbre en el comercio bilateral, según la Secretaría de Economía.
Marcelo Ebrard, titular de Economía, destacó que México negocia exenciones al amparo del T-MEC, enfatizando que los aranceles actuales, aplicados a productos como acero, aluminio y autopartes no cubiertas por el tratado, no han frenado el flujo comercial. “La relación con EE.UU. es estratégica; el T-MEC nos da ventaja competitiva”, afirmó Ebrard. No obstante, la OCDE advierte que una escalada arancelaria podría llevar a México a una recesión, con una contracción del PIB de hasta 1.3% en 2025
Analistas como Janneth Quiroz, de Monex, subrayan que el nearshoring sigue atrayendo inversión extranjera, pero la incertidumbre comercial podría desacelerar el crecimiento económico, proyectado en 0.2% para 2025 por el FMI. La fortaleza del peso, que se mantiene en 20.5 por dólar, y el aumento de remesas, que alcanzaron 32,000 millones de dólares en el primer semestre, han mitigado los impactos.
El sector empresarial, liderado por Concanaco Servytur, pide acelerar las negociaciones para evitar aranceles generalizados, que afectarían especialmente a la zona fronteriza. México apuesta por diversificar mercados y fortalecer el comercio regional para contrarrestar las tensiones comerciales con EE.UU.