México ha decidido retrasar seis meses la implementación de un impuesto a los pasajeros de cruceros en sus puertos y, además, eximirá de aranceles al trigo y al sulfato de amonio durante todo 2025.
El gobierno suspenderá el cobro del Derecho de No Residente (DNR) a los pasajeros de cruceros hasta la primera mitad del año, de acuerdo con un decreto presidencial publicado el 31 de diciembre en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación.
En un decreto separado, México anunció que productos como el trigo y el sulfato de amonio, un fertilizante, estarán exentos de aranceles durante 2025. Las autoridades explicaron que estas medidas buscan impulsar el turismo y fortalecer las economías locales, mientras que las exenciones arancelarias tienen como objetivo mitigar la inflación. De hecho, la inflación quincenal de México en la primera quincena de diciembre fue del 4.44% en términos interanuales, una ligera disminución desde el 4.54% registrado a finales de noviembre.
Las exenciones también incluyen productos como harina de trigo, productos de acero, tapas para frascos, redes de pesca, boyas y cuerdas.
Retraso en el cobro del impuesto a los cruceristas
A principios de diciembre de 2024, el gobierno mexicano decidió posponer seis meses el cobro del DNR a los cruceristas, tras una reunión entre funcionarios mexicanos y la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe. La asociación señaló que se necesitaban medidas integrales para abordar los efectos “devastadores” que tendría este impuesto sobre la industria.
El cobro de 42 dólares (alrededor de 860 pesos) por pasajero, que se había previsto para julio de 2025, fue aprobado previamente por el Congreso mexicano.
Se estima que en 2025 más de 10 millones de cruceristas llegarán a México, principalmente a los puertos de Cozumel y Mahahual en Quintana Roo, destinos que dependen en gran medida del turismo y la derrama económica de los cruceristas. La imposición de este cobro podría disuadir a los turistas de visitar estas regiones, según advirtió la asociación.