Home Depot anunció que no incrementará los precios de sus productos a pesar de los aranceles impuestos por la administración de Donald Trump, según informó Billy Bastek, vicepresidente ejecutivo de comercialización, en una conferencia telefónica. La empresa atribuye esta decisión a años de diversificación en sus fuentes de suministro, con más del 50% de sus productos provenientes de EE. UU. y ningún país extranjero representando más del 10% de sus compras en el próximo año.
A diferencia de otros minoristas como Walmart, que ya han subido precios, Home Depot apuesta por mantener su competitividad. “No prevemos aumentos generalizados para nuestros clientes”, afirmó Bastek. Sin embargo, la guerra comercial ha impactado la confianza del consumidor, que está cerca de mínimos históricos, según datos de la compañía.
En el primer trimestre, Home Depot reportó ingresos de 39,856 millones de dólares, un 9.4% menos, aunque mantuvo sus proyecciones de crecimiento de ventas en 2.8%. La empresa enfrenta retos por la caída en proyectos de vivienda debido a altas tasas hipotecarias. Expertos advierten que posibles aranceles a la madera canadiense podrían complicar su estrategia. La postura de Home Depot contrasta con la presión inflacionaria que enfrentan otros sectores
