Moody’s estima que la deuda de Pemex, de 106 mil millones de dólares, se reducirá 20% para 2027 gracias al apoyo financiero anual del gobierno de Claudia Sheinbaum, que incluye capital y alivio fiscal.
La estrategia busca aliviar la presión de una deuda que equivale al 8% del PIB, con vencimientos anuales de 8 mil millones de dólares. Esto permitirá mantener la producción en 1.8 millones de barriles diarios, pese a riesgos por la volatilidad del crudo.
Pemex, que genera el 15% de los ingresos fiscales, enfrenta altos costos y una refinería de Dos Bocas no rentable. El gobierno priorizará inversión en exploración para estabilizar la producción.
Analistas destacan que el éxito requiere disciplina fiscal y mayor eficiencia operativa para diversificar ingresos y garantizar la sostenibilidad financiera a largo plazo.