Los bancos en México aportaron 9,500 millones de pesos al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) en el segundo trimestre de 2025, según datos oficiales. Este fondo, que protege los ahorros de los depositantes, fortalece la estabilidad del sistema financiero, clave para una economía donde el sector bancario representa el 20% del PIB.
Las aportaciones, provenientes de cuotas de los bancos comerciales, crecieron 5.2% respecto al mismo periodo de 2024, impulsadas por el aumento en los depósitos bancarios, que alcanzaron 7.2 billones de pesos. Banorte y BBVA lideraron las contribuciones, reflejando su alta participación en el mercado.
El IPAB cubre hasta 400,000 pesos por cliente en caso de quiebra bancaria, beneficiando al 99% de los ahorradores.Sin embargo, analistas advierten que el fondo del IPAB, de 35 mil millones de pesos, sigue siendo limitado frente a posibles crisis sistémicas. La banca enfrenta retos como el aumento de la morosidad, que subió al 2.8% en 2025, y la incertidumbre económica global.
Estas aportaciones refuerzan la confianza en el sistema financiero mexicano, pero el IPAB necesita incrementar sus reservas. Políticas que promuevan la solvencia bancaria y la supervisión efectiva serán cruciales para proteger a los ahorradores y sostener el crecimiento económico.
