El Paquete Económico 2026 propone incrementar el IEPS a bebidas azucaradas para recaudar fondos y combatir obesidad y diabetes. Expertos advierten que los recursos, estimados en 100 mil millones de pesos anuales, no tienen garantía de destinarse a salud pública, limitando su impacto.
Especialistas como Joel Rodríguez Saldaña critican la falta de transparencia fiscal, señalando que México tiene el menor gasto en salud de la OCDE y que programas clave han sido eliminados. La ausencia de «etiquetado» de fondos preocupa, pues podrían diluirse en el presupuesto general.
A favor, Diego de la Mora y Alejandro Calvillo destacan que un alza al 20% reduciría el consumo un 27%, aliviando costos de enfermedades crónicas (10% del PIB). Sin embargo, Miguel Ángel Paz, de Concamin, rechaza la medida por su impacto inflacionario y nulo efecto en la diabetes, pese a una caída del 8% en ventas desde 2014.
El éxito del IEPS requiere reformas que aseguren la inversión en salud. Sin ellas, podría ser solo un paliativo recaudatorio, afectando la industria refresquera y la competitividad económica.