México aplicará aranceles de hasta 50% a productos de países sin tratados, como China y Vietnam, cubriendo 1,371 fracciones de electrodomésticos, textiles y autos. Esto elevará ingresos aduaneros a 254.8 mil millones de pesos, pero disparará precios al consumidor entre 40% y 80%, afectando el 40% del IPC y el poder adquisitivo.
Textiles y calzado, con alta dependencia asiática, enfrentan alzas de 35-60% en impuestos, según la Cámara de Comercio de China. NielsenIQ indica que 40% de consumidores ven impacto arancelario, y 50% reducirán compras, mientras el sector calzado opera al 40% de capacidad, con 22 meses de caída en empleo.
La medida busca proteger industrias, pero resta 0.5 puntos al PIB industrial en un contexto de crecimiento proyectado en 1.5% para 2025. Los aranceles agravan el déficit manufacturero y cadenas de suministro.
Expertos piden subsidios y diversificación de proveedores para mitigar inflación, que añadiría 1.2 puntos al IPC, y sostener la IED en manufactura, valorada en 20 mil millones de dólares.
