América Latina mantendrá un crecimiento del 2.4% en 2025, según el FMI, impulsado por consumo interno y exportaciones de materias primas, pese a riesgos por la guerra comercial EU-China y aranceles a México.
México proyecta un 1.2% de crecimiento, limitado por su dependencia de EU, mientras Brasil y Chile crecen al 3% y 2.8%. La inflación regional del 4.2% podría restringir ajustes monetarios.
La IED subió un 5% en 2024, pero aranceles y tensiones geopolíticas amenazan su flujo. El FMI sugiere diversificar mercados hacia Asia y Europa.
Analistas instan a fortalecer políticas fiscales y reformas para un crecimiento inclusivo, ante un panorama global incierto y presiones inflacionarias.