La industria del juguete en México enfrenta una fuerte desaceleración debido a nuevos aranceles a importaciones, inflación en insumos y cambios en los hábitos de consumo, donde los niños prefieren dispositivos electrónicos y videojuegos sobre juguetes tradicionales.La Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (AMIJU) proyecta un crecimiento de apenas 2% para 2025.
Los aranceles, que entrarán en vigor en enero de 2026 y oscilan entre 5% y 50% para productos de países sin tratado comercial, incrementarán costos hasta 35%, impactando especialmente a pequeñas y medianas empresas. Además, el 53.3% de los insumos son importados, principalmente de China.El cambio en preferencias acelera la caída: los videojuegos crecen más de 25% anual, con un gasto promedio de 2,800 pesos por consumidor, contra solo 400 pesos en juguetes clásicos.
Empresas como Mattel reportaron -6% en ventas y -50% en margen bruto en el tercer trimestre de 2025.Aunque el comercio electrónico avanza 30% anual, con picos en temporadas como Buen Fin, proyectos como el Hub Juguetero en Monterrey siguen estancados ante incertidumbre por el T-MEC.




