La administración de Donald Trump duplicó el costo de la visa de turista y negocios (B1/B2) a Estados Unidos, pasando de 185 a 370 dólares, impactando a miles de mexicanos que buscan viajar por turismo, trabajo o estudios. Esta medida, efectiva desde el 15 de julio, ha generado críticas por su efecto en la economía de viajeros y el comercio bilateral.
El Departamento de Estado de EU anunció que los solicitantes que pagaron la tarifa anterior antes del 1 de julio de 2025, pero cuya cita fue programada para después del incremento, pueden recibir un reembolso de 250 dólares. La condición es presentar el comprobante de pago original y solicitar el reembolso en el Centro de Atención a Solicitantes (CAS) dentro de los 90 días posteriores a la cita.
Expertos advierten que el alza podría reducir el flujo de viajeros mexicanos, que aportan más de 20 mil millones de dólares anuales a la economía estadounidense. La Secretaría de Relaciones Exteriores de México negocia medidas para mitigar el impacto, mientras que agentes de viajes reportan una caída del 15% en solicitudes de visa desde el anuncio, afectando el turismo y los negocios transfronterizos.