La presidenta nacional de Morena, Luisa María Alcalde, respondió con dureza a las declaraciones del dirigente del PAN, Jorge Romero, quien anunció que su partido impugnará la reciente elección judicial. En un mensaje difundido a través de su cuenta en X (antes Twitter), la morenista acusó al líder panista de despreciar la democracia y el Estado de derecho.
“Está claro que al dirigente del PAN no le gusta la democracia y desprecia lo que durante tanto tiempo llamaron ‘Estado de derecho’”, escribió Alcalde.
La reacción se dio luego de que el PAN confirmó que recurrirá a la Sala Superior del Tribunal Electoral y a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para invalidar el proceso electoral en el que se eligieron por voto popular 881 cargos judiciales, entre ellos ministros, magistrados y jueces.
Morena defiende legitimidad de la reforma judicial
Alcalde Luján subrayó que la reforma judicial que permitió esta inédita elección fue aprobada por mayoría calificada tanto en el Congreso de la Unión como en 25 congresos estatales, incluidos algunos con gobiernos de oposición.
Asimismo, enfatizó que el proceso contó con una participación ciudadana cercana a los 13 millones de votantes, cifra que —afirmó— supera por tres millones los votos obtenidos por el PAN y duplica los del PRI en la elección presidencial de 2024.
“El INE, por mayoría, determinó la legalidad de la elección y ya entrega constancias”, afirmó la dirigente morenista.
Acusa al PAN de querer “controlar” la Corte
La líder de Morena acusó a Acción Nacional de querer mantener el control de la SCJN por la vía de las élites y no del voto ciudadano.
“Desde el PAN desearían seguir controlando la Suprema Corte de Justicia de la Nación para echar un telefonazo, invalidarlo todo e imponer su voluntad. Lástima para ellos, el pueblo ya decidió”, sentenció.
PAN señala irregularidades y prepara impugnación
Más temprano, el vocero del PAN, Jorge Triana, junto con el coordinador jurídico del partido, Santiago Torreblanca, y el exsenador Roberto Gil Zuarth, anunciaron la impugnación formal del proceso, que calificaron como fraudulento e inconstitucional.
Entre las irregularidades denunciadas se encuentran:
- Distribución masiva de listas de candidatos afines al oficialismo («acordeones«)
- Presunto embarazo de urnas
- Intervención de gobiernos estatales
- Ausencia de condiciones de equidad y vigilancia ciudadana
Los panistas también aseguraron que el proceso fue diseñado para consolidar el control del partido en el poder sobre el Poder Judicial, debilitando la división de poderes y el sistema de contrapesos.
Este nuevo capítulo en la disputa por la elección judicial refuerza la polarización política en torno a la reforma más controvertida del sexenio, con Morena defendiendo el voto como legitimador, y la oposición señalando una elección “de Estado” bajo condiciones antidemocráticas. La resolución de las impugnaciones recaerá ahora en las instituciones que, justamente, han sido puestas en el centro del debate.