La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, sostuvo una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para discutir estrategias contra el tráfico de fentanilo, una prioridad en la agenda bilateral. En un gesto de cooperación, Sheinbaum reafirmó el compromiso de México para combatir el flujo de esta droga sintética, que ha agravado la crisis de opioides en EE.UU.
Durante la llamada, ambos líderes exploraron medidas conjuntas, incluyendo mayor vigilancia en la frontera, intercambio de inteligencia y acciones contra las redes de narcotráfico. “México está decidido a frenar este problema, pero necesitamos colaboración mutua”, declaró Sheinbaum en un mensaje posterior, destacando la importancia de atacar las causas estructurales, como el consumo en EE.UU.
Trump, por su parte, calificó el diálogo como “productivo” y expresó en redes sociales su deseo de trabajar con México para “detener el veneno que cruza la frontera”. Analistas ven esta interacción como un intento de ambos gobiernos de alinear posturas tras tensiones previas por temas migratorios y comerciales.
El acercamiento ocurre en un contexto de presión estadounidense para que México intensifique sus esfuerzos contra el fentanilo, una crisis que deja miles de víctimas anuales.