La pobreza laboral en México alcanzó un mínimo histórico en el primer trimestre de 2025, al ubicarse en 35.8%, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Esto representa una reducción de 2.1 puntos porcentuales frente al mismo periodo de 2024, cuando se situó en 37.9%. El descenso se atribuye al aumento del ingreso laboral per cápita en 3.8% real.
El Coneval destacó que el crecimiento de los salarios en sectores clave, como la construcción y los servicios, junto con políticas públicas focalizadas, contribuyó a esta mejora. Sin embargo, la brecha regional persiste: estados como Chiapas y Oaxaca reportan niveles de pobreza laboral superiores al 50%, mientras que Nuevo León y Baja California están por debajo del 25%.
Analistas advierten que la desaceleración económica proyectada para 2025 podría limitar mayores avances. “Es crucial fortalecer el empleo formal y la productividad para sostener esta tendencia”, señaló María López, economista de la UNAM. El gobierno federal planea reforzar programas sociales y estímulos al empleo para consolidar la reducción de la pobreza laboral en los próximos años.
La pobreza laboral cayó a su nivel más bajo en dos décadas, pero la diferencia entre hombres y mujeres no se movió. Por cada 100 varones cuyas remuneraciones son insuficientes para alimentar a su familia, hay 113 trabajadoras en la misma situación, la misma brecha que en el trimestre previo.
La pobreza laboral continúa afectando desproporcionadamente a las mujeres, enfatizó la organización México ¿Cómo Vamos? En un reporte explicó que en todos los estados del país hay más mujeres que hombres en esta situación