El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó este jueves su plan para imponer aranceles recíprocos, equiparando los impuestos que otros países cobran sobre las importaciones, lo que podría desencadenar una nueva guerra comercial a nivel global. Durante la firma de la orden en la Casa Blanca, Trump también adelantó que los aranceles sobre los automóviles se implementarán pronto.
«Si nos imponen un arancel o impuesto, nosotros les imponemos exactamente el mismo nivel de arancel o impuesto, así de sencillo», expresó el mandatario en la Oficina Oval. Aunque reconoció que los precios podrían aumentar como consecuencia de estas tarifas, aseguró que eventualmente disminuirían con el tiempo.
Trump ha insistido en que esta medida nivelará el campo de juego entre los fabricantes estadounidenses y sus competidores internacionales. Sin embargo, analistas advierten que los aranceles podrían tener efectos negativos, al generar inflación, ya que el costo de los aranceles recae sobre los importadores y, por ende, sobre el consumidor final.
Aunque no dio una fecha exacta para la implementación de estos aranceles, en las últimas semanas Trump ya había anunciado tarifas adicionales del 10% sobre productos chinos y del 25% sobre el aluminio y el acero, lo que afecta a varios países de América Latina, especialmente a Brasil, México y Argentina. También amenazó con imponer un arancel del 25% sobre las mercancías provenientes de México y Canadá si no toman medidas más estrictas para frenar la inmigración y el tráfico de fentanilo.
Howard Lutnick, nominado por Trump para la Secretaría de Comercio, informó que Estados Unidos comenzará a aplicar aranceles personalizados por país a partir del 2 de abril. Un funcionario de la Casa Blanca precisó que el gobierno priorizaría a los países con mayores superávits comerciales y aranceles más altos.
El presidente también identificó el Impuesto al Valor Agregado (IVA) como una barrera comercial a incluir en los cálculos de los aranceles recíprocos. Entre los factores que se tomarán en cuenta para fijar los aranceles están las tasas impositivas de otros países, los subsidios a las industrias, las regulaciones y las posibles devaluaciones de monedas. Se espera que los ingresos generados por estos aranceles contribuyan a reducir el déficit presupuestario proyectado de 1.9 billones de dólares.
Entre los países que se verían más afectados están China, Japón, Corea del Sur y la Unión Europea, con Trump destacando que, en términos comerciales, los aliados de Estados Unidos a menudo resultan ser peores que los rivales, calificando a la Unión Europea como «brutal». Además, se refirió a la India, mencionando que el país aplica un arancel del 25% a los automóviles estadounidenses, justo antes de reunirse con el primer ministro indio Narendra Modi en la Casa Blanca. Trump también sugirió que el comercio con países del BRICS podría enfrentar aranceles de hasta el 100%.




