La actividad económica de Estados Unidos mostró una ligera expansión en la mayoría de las regiones desde principios de octubre, con un crecimiento «moderado» del empleo y una inflación que aumentó a un ritmo moderado, según el Libro Beige de la Reserva Federal (Fed) publicado el miércoles.
«Aunque el crecimiento de la actividad económica fue generalmente pequeño, las expectativas de crecimiento aumentaron de manera moderada en la mayoría de las regiones y sectores», indicó el banco central de EE. UU., basándose en las observaciones de contactos empresariales y comunitarios de sus 12 bancos regionales hasta el 22 de noviembre. El informe también señaló que los contactos empresariales expresaron su optimismo sobre un aumento de la demanda en los próximos meses.
Estos resultados serán clave para que los responsables de la política monetaria decidan con qué rapidez y en qué medida deben reducir las tasas de interés, que actualmente se encuentran entre el 4.50% y el 4.75% tras las rebajas de septiembre y noviembre.
La última reunión del año de la Fed se celebrará dentro de dos semanas, y los mercados financieros anticipan una reducción de un cuarto de punto porcentual en las tasas de interés, a pesar de que la inflación ha sido más persistente de lo previsto.
Una de las medidas clave de las presiones subyacentes sobre los precios, el índice de precios de los gastos de consumo personal (PCE) de 12 meses, excluyendo alimentos y energía, ha permanecido estancado entre un 2.6% y un 2.8% desde mayo, por encima del objetivo del 2% establecido por la Fed.
No obstante, muchos miembros de la Fed siguen creyendo que la inflación está descendiendo, especialmente debido a los altos costos de los préstamos a corto plazo, que se encuentran muy por encima del nivel «neutral», el cual no representaría un lastre significativo para la economía.
En septiembre, la mayoría de los responsables de la Fed estimaban que el tipo de interés neutral no superaría el 3.5%.
Dado que el mercado laboral sigue siendo robusto, aunque se está enfriando gradualmente, los funcionarios del banco central prefieren no mantener la tasa de interés oficial demasiado por encima de ese nivel durante mucho tiempo.