Empresas como Amazon y Woodside Energy Group han anunciado proyectos en México que suman alrededor de 20 mil millones de dólares, lo que representa un logro significativo para la presidenta Claudia Sheinbaum en su esfuerzo por atraer inversiones de empresarios cautelosos.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, detalló el martes que al menos cuatro proyectos de inversión llegarán a México entre 2025 y 2026 en diversos sectores. Uno de ellos es de Amazon, que destinará aproximadamente 6 mil millones de dólares para fortalecer su red y capacidades digitales en el país.
Además, Royal Caribbean Cruises planea un proyecto turístico de 1,500 millones de dólares en el estado de Quintana Roo, según indicó Ebrard en una conferencia de prensa tras la reunión del Diálogo CEO México-EU. También se espera que Petróleos Mexicanos (Pemex) participe en las inversiones anunciadas durante el evento.
Ebrard explicó que Woodside planea invertir 10,400 millones de dólares en un proyecto en aguas profundas en colaboración con Pemex en el golfo de México. Woodside Energy Group, el mayor productor de energía de Australia, había anunciado en julio la adquisición de Tellurian Inc. por 900 millones de dólares y mencionó que planea vender hasta el 50 por ciento del proyecto para tomar una decisión final de inversión en 2025, buscando socios para ello.
En agosto, Woodside también anunció la compra de un proyecto de amoníaco limpio en Texas por 2,350 millones de dólares, relacionado con OCI Clean Ammonia Holding, una empresa química holandesa. Esta planta, que está en construcción, comenzará a producir a partir de 2025 y un año después generará amoníaco con menor contenido de carbono.
Actualmente, la mayor parte del amoníaco se produce utilizando gas natural, aunque también puede fabricarse a partir de hidrógeno obtenido de fuentes de energía renovables y nitrógeno del aire, lo que lo convierte en un combustible potencial de cero emisiones para el transporte marítimo y las plantas de energía.
Durante la reunión del CEO Dialogue en México el 15 de octubre, que fue liderada por la presidenta Sheinbaum, se anunció que Woodside invertirá en un proyecto en aguas profundas con Pemex, aunque aún no se han proporcionado más detalles.
Al dirigirse a aproximadamente 240 líderes de empresas mexicanas y extranjeras, Claudia Sheinbaum intentó minimizar las preocupaciones sobre reformas constitucionales que podrían afectar la democracia y la independencia judicial en el país, el principal socio comercial de Estados Unidos. Entre estas reformas se encuentra una reforma al Poder Judicial aprobada el mes pasado, que permite elegir a los jueces federales por voto popular, así como una reforma energética que prioriza a las empresas estatales sobre las privadas en la generación y transmisión de energía. Los críticos advierten que estos cambios podrían aumentar los riesgos para los inversionistas en México, dado que el control judicial podría pasar al partido Morena, de Sheinbaum.
La presidenta también aseguró que, aunque el gobierno busca gestionar el 54 por ciento de la generación y transmisión de energía, habrá reglas claras para la inversión privada en el 46 por ciento restante. Durante la reunión, el gobierno estableció grupos de trabajo con empresas para abordar proyectos energéticos y anunció que tendrá listo su plan energético a finales de año. Un conjunto de normas, conocidas como leyes secundarias, definirá el proceso de participación de las empresas privadas en estos proyectos.