Casi dos de cada tres pesos que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) intenta recuperar como créditos fiscales están en litigio, principalmente debido a casos de grandes contribuyentes que tienen los recursos para defenderse en tribunales.
Hasta el cierre de junio de 2024, el SAT había registrado un total de 1,862,182 créditos fiscales, que suman 2 billones 662,508 millones de pesos, según datos proporcionados por la misma autoridad tributaria. De este total, 189,922 créditos fiscales, equivalentes a un billón 707,401 millones de pesos, se encuentran en litigio, lo que representa el 64% del saldo total. Esto significa que cada crédito fiscal en litigio tiene un saldo promedio de 8.99 millones de pesos.
Roberto Colín, miembro de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, explicó que los créditos fiscales en litigio suelen corresponder a grandes contribuyentes que pueden permitirse interponer recursos legales como juicios de nulidad o amparos. «Un crédito fiscal es un adeudo del contribuyente. Este puede presentar un recurso legal si lo considera necesario», señaló.
Existen dos tipos principales de créditos fiscales: los autodeterminados, en los que el contribuyente declara pero no paga sus impuestos, y los que surgen a partir de resoluciones del SAT tras auditorías. En el actual sexenio, el SAT ha puesto un énfasis particular en auditar a grandes contribuyentes, lo que ha resultado en un aumento en el número de créditos fiscales relacionados con estos contribuyentes.
En junio de 2018, bajo el gobierno de Enrique Peña Nieto, el SAT tenía créditos fiscales de grandes contribuyentes por 150,087 millones de pesos. Seis años después, esta cifra ha aumentado seis veces, alcanzando 981,786 millones de pesos.
Colín anticipa que, considerando el historial del SAT en cuanto a la resolución de juicios fiscales, es probable que más del 50% de los créditos fiscales en litigio terminen en una resolución favorable para la autoridad fiscal.
El Colegio de Contadores también señaló que existen varios métodos para pagar estos créditos fiscales: ya sea de una sola vez, mediante pagos diferidos o en parcialidades con recargos.
Además de los créditos fiscales en litigio, al cierre de junio pasado, el SAT tenía 1,273,330 créditos fiscales factibles de cobro, sumando 595,738 millones de pesos, los cuales ya se encuentran en alguna fase del procedimiento administrativo de ejecución para su recuperación. La autoridad tributaria también reportó 398,930 créditos fiscales con baja probabilidad de cobro, que totalizan 359,370 millones de pesos, correspondientes a deudores insolventes o no localizados, y que están en proceso de comprobación de incobrabilidad.