Empresas y sectores clave en Brasil, México, Argentina y Colombia están intensificando la acumulación de inventarios para mitigar el impacto de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, ante el fin de la prórroga de 90 días para nuevos aranceles impulsados por el presidente Donald Trump. La incertidumbre por posibles tarifas y disrupciones en las cadenas de suministro globales impulsa esta estrategia, según un análisis de Bloomberg Línea.
“Las empresas prefieren tener inventarios llenos hasta el techo, e incluso construir almacenes adicionales, porque el futuro es incierto”, explicó un especialista argentino en comercio. En México, MTM Logix reporta que las compañías han reducido sus inventarios promedio de 60 a 45 días, mientras los fletes en la ruta China-México suben a US$3,000 por contenedor, frente a US$1,600 a inicios de 2025. México, gracias al T-MEC, ha evitado parte del impacto, pero sectores como el automotor y el acero enfrentan retos.
En Brasil, las exportaciones a China cayeron 12.2% entre enero y abril, totalizando US$28,500 millones, según ComexStats. La logística también sufre: los costos terrestres alcanzan el 17.9% del valor del producto, y el transporte aéreo enfrenta presión por el auge del e-commerce. Las empresas buscan anticiparse a las distorsiones globales.




