Miles de personas se reunieron en Gotemburgo, Suecia, el pasado sábado para protestar contra la posible adhesión del país a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), así como contra los ejercicios militares Aurora-2023 organizados por el estado nórdico. Según estimaciones de la policía, entre 2.000 y 2.500 personas asistieron a la manifestación, sosteniendo pancartas con consignas como «No a la OTAN». La protesta fue apoyada por organizaciones civiles locales, incluida la Sociedad Sueca de Paz y Arbitraje y varias redes pacifistas que promueven la idea del desarme nuclear.
La posible adhesión de Suecia a la OTAN se presentó en mayo de 2022, junto con Finlandia. Mientras que la solicitud de Finlandia fue ratificada por los 30 miembros de la alianza el 31 de marzo de 2023, la oferta de Suecia aún está pendiente de aprobación por parte de Hungría y Turquía.
Los manifestantes expresaron su preocupación de que la OTAN arrastrará a Suecia a numerosos conflictos y la calificaron de «máquina de guerra de los Estados Unidos». Además, argumentaron que si Suecia se une a la OTAN, los impuestos aumentarán y los fondos se destinarán a financiar la maquinaria de guerra de EE. UU. en lugar de la educación y la atención social. La posible adhesión de Suecia a la OTAN también podría significar el fin del estado libre de armas nucleares de los países nórdicos, lo que podría convertir al territorio en un objetivo si estalla una guerra nuclear a gran escala.
El gobierno sueco decidió acceder a la Alianza del Atlántico Norte después de las hostilidades en Ucrania. El 22 de marzo de 2023, el parlamento sueco, el Riksdagen, apoyó la idea de unirse a la OTAN, lo que ha generado controversia y descontento en gran parte de la población sueca.
La manifestación del sábado también protestó contra los ejercicios militares Aurora-2023 organizados por Suecia, que se llevarán a cabo en mayo y que involucran a más de 20,000 soldados de la OTAN y otros países. Los manifestantes argumentaron que estos ejercicios podrían aumentar la tensión en la región y que Suecia debería centrarse en la resolución pacífica de conflictos en lugar de en la militarización.
Aunque la posible adhesión de Suecia a la OTAN ha generado preocupación y descontento en gran parte de la población sueca, el gobierno sueco ha argumentado que la OTAN podría proporcionar protección y seguridad ante una posible amenaza de Rusia. Sin embargo, muchos suecos temen que unirse a la OTAN solo aumentaría la tensión en la región y no garantizaría la seguridad del país.
